¿Por qué lloran a mi paso
los sauces del camino?
¿Por qué veo triste el ocaso
allá en el infinito?
¿Por qué me siento forastero
caminando entre los cerros?
¿Por qué no canta el jilguero?
¿Por qué me ladran los perros?
¿Por qué conforme voy llegando
el corazón se me acelera
cuando paso por el Pando
por la iglesia y por la era?
Me paro frente a mi casa
y me recibe la soledad…
La cerradura medio dormida
le cuesta dejarme entrar.
¿Por qué al cruzar el umbral
se me antoja como un quejido
el crujir de las maderas?
¿No me habrán reconocido?
Busco entre las sombras
y el olor a envejecido
huellas de mi pasado
añoranzas de lo vivido.
Las lágrimas se me escapan
y se me agolpan los pensamientos
saludo a un viejo retrato
y me contesta el silencio.
¿Por qué me siento feliz
y triste al mismo tiempo?
¿Por qué me siento confundido?
¿Por qué?....de nuevo silencio.
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